Las encuestas y su utilidad en ámbitos múltiples

Las encuestas son herramientas muy útiles en múltiples ámbitos del saber. En el terreno del marketing y la publicidad, nos sirve para conocer de primera mano los datos demográficos de nuestro principal segmento de clientes, así como sus intereses y sus necesidades principales.

En cuanto a los eventos públicos, son útiles para saber qué tipo de gente acude a ellos. Incluso el activismo se nutre de las encuestas a la hora de ofrecer datos sólidos en pobreza y exclusión social, en sexismo, en racismo, etc.


La cuestión no es si las encuestas son importantes. Lo son y, cuando lo que pretendemos es diseñar y desarrollar proyectos que requieren de una inversión de créditos online de WannaCash.es por nuestra parte o de cualquier otra forma de pago, son incluso necesarias si queremos ir sobre seguro desde el principio, disminuyendo de manera sustancial las probabilidades de que un tropiezo nos haga perder grandes sumas de dinero.

La pregunta, en definitiva, es otra: ¿cómo las hacemos? No todo lo que algunas personas llaman encuesta lo es. No basta, por ejemplo, con hacer un encuesta en Twitter y dejar que vote quien quiera.

Una encuesta tiene que estar planeada, analizada y bien estructurada desde el principio, y eso implica pensar a fondo y detenidamente de qué manera vamos a establecer una muestra poblacional decente. La cosa se complica mientras más grande sea el rango geográfico de encuestados y mientras más diverso sea.

Por ejemplo, en una encuesta a nivel nacional debemos saber seleccionar a personas que realmente representen a cada comunidad autónoma y a cada región, pero además de manera diversa: hombres y mujeres, personas de todas las edades, personas de cualquier etnia y capacidad intelectual, etc.

Una vez establecida la muestra poblacional básica, debemos dedicar un tiempo amplio y eficiente a desarrollar las preguntas que queremos hacer, en las cuales tendremos que sintetizar de manera adecuada todo lo que queremos saber.

Si lo hacemos bien, la encuesta dará respuesta a nuestras curiosidades o, en el caso de que haya dinero de por medio, nos permitirá por ejemplo sacar partido a nuestros préstamos personales.