La era digital de la información y la comunicación.

A día de hoy, somos incapaces de imaginar una vida sin internet. Algunos psiquiatras incluso podrían llegar a catalogarla de adicción, tal vez la adicción de nuestro tiempo.


Esto es fácil de entender: sin internet, perderíamos toda esa comunicación con el mundo que hemos ganado, quizá con nuestra familia y con nuestros mejores amigos. También destruiríamos en cuestión de días nuestro negocio, que hoy en día difícilmente puede florecer sin un trabajo constante de community management y trabajo promocional en internet.


En general, nos sentiríamos aislados, y esa sensación la tendríamos tanto viviendo en una isla de verdad, como en la gigantesca capital de un país europeo.


Eso es lo que nos brinda internet: la rotura de las fronteras y una sensación alegórica de libertad. Por ello, deberíamos empezar a plantearnos que la edad contemporánea en la que algunos creen que seguimos inmersos, ya pasó. Actualmente vivimos en la era digital, la era de la información y la comunicación.




En los países occidentales hay abundancia de todo, y no solo de comida. A nuestra disposición tenemos un sinfín de datos que pueden llegar a abrumarnos, pues no sabemos qué hacer con todos ellos. Por supuesto, hay que filtrarlos. No todo lo que se dice en internet es cierto, y en ocasiones es complicado distinguir la intencionalidad del emisor si no vemos su cara.


Pero otras cosas no solo son ciertas, sino buenas. En cuanto a información, disponemos de wikis, la mejor consulta posible que podemos hacer para empezar a conocer un tema concreto. Por otro lado, las rutinas tradicionales, como las compras, la búsqueda de prestamistas o las reuniones sociales, se han pasado también a los medios digitales.


Ahora, podemos encontrar tiendas online especializadas en cómics, en ropa gótica o en gafas graduadas. También podemos encontrar webs de solicitud de créditos con ASNEF si engrosamos una lista de morosos en una entidad bancaria física, así como foros de internet donde podemos conocer gente a la que le guste la misma película, serie o afición que nosotros. Por eso sería tan difícil deshacerse de internet hoy en día, es demasiado cómodo.